Concentración en apoyo Huelga General 24h Huelga Feminista 8M
Viernes, 8 de marzo de 2019 de 11:30 a 13:00
28 feb 2019
Ley de Mutuas y Ley de Bonus: Un ataque directo y continuo a la salud de la clase trabajadora
En los últimos años, la clase trabajadora está sufriendo descomunales agresiones por parte de la patronal, apoyados por los diferentes gobiernos que han ocupado la Moncloa.
Uno de los ataques más contundentes y que mayor repercusión tiene sobre las trabajadoras y trabajadores son los relacionados con la prevención y con los accidentes de trabajo; la siniestralidad laboral es un tema que los empresarios tienen la obligación de controlar y son los responsables de su prevención. Con la Ley de Prevención de Riesgos Laborales de 1995, a pesar de ser muy limitada, se consiguió establecer un marco legal como base para la prevención y la disminución de los accidentes; evidentemente los accidentes bajaron considerablemente, pero no está tan claro que la ley haya sido la causante de esta bajada de cifras.
La prevención es una materia con un alto coste económico para las empresas, y requiere de una constante inversión, y como todos sabemos, gasto y empresario son dos palabras opuestas. La inversión económica en esta materia por parte de las empresas, supondría un ahorro económico a largo plazo para las mismas, ya que los accidentes y el absentismo se reducirían muy notablemente.
La patronal ha usado su influencia en los diferentes gobiernos y poco a poco han ido perfilando un escenario más beneficioso para sus intereses, culminado su estrategia cuando el gobierno del PP aprobó la ley 35/2014 y el R.D. 625/2014, con las que las mutuas pasan a ser entidades colaboradoras de la Seguridad Social y se dedican al control y seguimiento de los accidentes.
Tras su aplicación, podemos observar cómo el desvío de accidentes y enfermedades profesionales a la seguridad social ha aumentado. La calificación de accidentes sin baja se ha disparado y actualmente se están produciendo situaciones donde trabajadores/as con huesos rotos son considerados accidentes leves sin baja. Por poner un ejemplo, se han encontrado casos en los que un trabajador con el brazo roto en un accidente laboral, es considerado sin baja; ¿esto, ¿qué quiere decir?, ¿Qué al día siguiente se incorpora a su puesto de trabajo? No, el empresario prefiere cargar con el gasto y enviar al trabajador a su casa pagándole como si estuviese trabajando, disimulando esto, con permisos retribuidos u otras licencias.
Evidentemente, lo único que se consigue con estas prácticas es la desprotección de los trabajadores y trabajadoras y la mercantilización de los accidentes de trabajo. El objetivo empresarial es claro: obtener más beneficios y reducir los gastos en materia de prevención.
Es ahí donde entra la ley de bonus, R.D. 231/2017, de 10 de marzo, por el que se regula el establecimiento de un sistema de reducción de las cotizaciones por contingencias profesionales a las empresas que hayan disminuido de manera considerable la siniestralidad laboral.
El preámbulo de este R.D. es claro: “premiar” a las empresas que “inviertan e incentiven en prevención”. Reduciendo hasta en un 10% sus cotizaciones a la Seguridad Social y mejorando notablemente su imagen corporativa.
Esta idea estaría bien si fuese un hecho real. Pero desgraciadamente esto conlleva a la picaresca, y las medianas y grandes empresas están esforzándose al máximo en manipular las bajas para conseguir el 0% en accidentes. La empresa, con la complicidad de las mutuas, apela al “criterio médico” para “disfrazar” la naturaleza del accidente, convirtiéndose en justificación legal para manipular y dar un nuevo sentido a las bajas por accidentes, en beneficio de las empresas. Además, gracias a la situación de precariedad del mercado laboral y a la situación de paro y desamparo de los trabajadores y trabajadoras, alcanzan sus objetivos. El miedo y la necesidad hacen que las plantillas acepten situaciones contrarias a sus derechos y perjudiciales para su salud.
Ante esta situación desde CGT siempre vamos a exigir que el Sistema Público de Salud gestione los accidentes y enfermedades profesionales, y que las mutuas tan sólo sean entidades asesoras de las empresas en materia de Prevención de Riesgos laborales.
No obstante, y pese a la información que siempre damos desde nuestras secciones sindicales, desde CGT queremos informarte de los pasos que debes seguir cuando sufras un accidente laboral o una enfermedad profesional.
Accidente laboral
Qué hacer si sufres un daño en el trabajo, vas al servicio médico de la empresa o mutua y te mandan a casa con “permiso retribuido”:
Desde CGT hemos detectado que estos casos se vienen produciendo muy frecuentemente. Pongamos un ejemplo: Estás en tu puesto de trabajo y sufres un tirón en el hombro al hacer un movimiento. Comunicas a tu mando inmediato que debes ir al servicio médico o a la mutua. Tu mando tiene la obligación de entregarte un papel para que puedas acudir (GUARDATE UNA COPIA). Una vez allí, te atienden y te ponen una pomada para que se te alivie el dolor, finalmente te dicen que te vayas unos días a casa para descansar con un PERMISO PAGADO, sin baja médica.
¿Qué debes hacer?
Exigir el parte de accidente a tu mando inmediato y el informe de atención medica de donde seas atendido.
Si no te dan la baja y te mandan a casa con “permiso pagado”:
- a. Acudir a tu Médico de Cabecera y pedir la baja por contingencias comunes. Explicando al médico que has sufrido un accidente laboral, para iniciar así el cambio de contingencias.
- b. Acudir al INSS (o al organismo territorial competente) y solicitar un cambio de contingencias, aportando la documentación que te han dado: parte de accidente del mando inmediato, informe de atención médica y el comunicado de baja de Seguridad Social.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE HACER TODO ESTO?
Básicamente porque dependiendo de la lesión, si no queda constancia documental de que el origen es laboral, no vas a poder demostrarlo. Debes guardar toda esta documentación por si en un futuro tu lesión se agrava, no te dan la baja de origen laboral, y quieres reclamar.
Enfermedad profesional
Enfermedad profesional es la contraída como consecuencia del trabajo ejecutado en las actividades que se especifiquen en el cuadro aprobado en el R.D.1299/2006, y por las disposiciones de aplicación y desarrollo de esta Ley, y que esté provocada por la acción de los elementos o sustancias que en dicho cuadro se indiquen para cada enfermedad profesional.
¿COMO ACTUAR SI CREES QUE PUEDES PADECER UNA ENFERMEDAD PROFESIONAL?
En primer lugar, si en la empresa hay representación sindical de CGT, acude a ella. Ellos/as te informarán y te asesorarán en todo momento. Si no lo hubiera, los pasos que debes seguir son los siguientes:
- Acude al servicio médico, botiquín o mutua de la empresa. Exponiendo allí tu situación y reclamando un informe de atención (justificante).
- En caso de que estos se hagan cargo de tu situación (no suele pasar), no tendrías que tener más problemas, pero como en muchas ocasiones no es así, debes:
- a. Acudir a tu médico de cabecera y exponerle tu situación. Éste considerará si tu estado de salud requiere baja laboral o no, y de la misma manera, te derivará al médico especialista para que éste diagnostique qué enfermedad sufres.
- b. Si tu enfermedad está dentro de las consideradas como enfermedades profesionales, tienes que acudir al INSS (o al organismo territorial competente) para solicitar un cambio de contingencias. Si no lo estuviera dentro de las consideradas como enfermedades profesionales, y tu médico considera que sí que es derivada de tu trabajo, debes de iniciar los trámites pertinentes para que lo sea, teniendo que llegar en casi todos los casos a judicializar el conflicto.
Te aconsejamos que acudas a la sede de CGT más cercana para que te ayuden con todas tus dudas
http://cgt.org.es/ley-de-mutuas-y-ley-de-bonus
IAG: Precariedad vs 2.897 M € de Beneficios (44,2% más)
International Airlines Group (IAG) -holding de British Airways (BA), Iberia, Vueling, Aer Lingus y Level- ha reportado para el ejercicio 2018 un beneficio de 2.897 millones de euros, cifra que supone una mejora del 44,2% respecto a 2017.
Los ingresos totales ascendieron a 24.406 millones de euros, lo que representa un aumento del 6,7 %, mientras que el beneficio de explotación se situó en 3.678 millones, un 38,2% más, comunicó este jueves IAG a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Beneficios operativos por aerolínea
El beneficio de las operaciones de British Airways ascendió a 1.952 millones de libras esterlinas (2.277,6 M €), excluyendo partidas excepcionales, lo que supone 203 millones de libras esterlinas más que en el ejercicio anterior, con un aumento de la capacidad del 2,5%.
El beneficio de las operaciones antes de partidas excepcionales de Iberia ascendió a 437 millones de euros, lo que supone un incremento de 61 millones de euros respecto al ejercicio anterior, alcanzando un margen operativo ajustado del 10,0%. La capacidad creció un 9,6% durante el año, con una reducción de los ingresos unitarios de pasaje a consecuencia del descenso del yield, compensado parcialmente por el incremento del coeficiente de ocupación.
El beneficio de las operaciones de Vueling fue de 200 millones de euros, lo que supone 12 millones de euros más a pesar de sufrir importantes incidencias operativas por las regulaciones y las huelgas del control del tráfico aéreo. El margen operativo ajustado descendió 1,0 punto con respecto al año anterior, hasta el 11,8%.
El beneficio de las operaciones de Aer Lingus fué de 305 millones de euros, un resultado récord que representa una mejora de 37 millones con respecto al año anterior. La capacidad se incrementó un 10,0%, gracias al aumento de los vuelos a nuevas rutas, como Filadelfia y Seattle.
• El impacto neto por cambio de divisa en el beneficio de las operaciones del ejercicio fue adverso en 129 millones de euros. • Los ingresos unitarios de pasaje del ejercicio aumentaron un 0,1%, mientras que a tipos de cambio constantes aumentaron un 2,4%. • Los costes unitarios excluyendo el combustible del ejercicio antes de partidas excepcionales disminuyeron un 2,2%, mientras que a tipos de cambio constantes disminuyeron un 0,8%. • Los costes unitarios de combustible del ejercicio aumentaron un 8,0%, un 12,5% a tipos de cambio constantes. • El efectivo se situó en 6.274 millones de euros a 31 de diciembre de 2018, lo que supone un descenso de 402 millones de euros respecto al cierre del ejercicio 2017 y la deuda neta ajustada/EBITDAR aumentó un 0,1 hasta 1,6 veces. • El beneficio después de impuestos antes de partidas excepcionales se situó en 2.481 millones de euros, lo que supone un aumento del 11,2% y el beneficio ajustado por acción aumentó un 15,1%. • El dividendo complementario propuesto es de 16,5 céntimos de euro por acción. • Dividendo especial propuesto de 35,0 céntimos de euro por acción, aproximadamente 700 millones de euros.
https://www.hosteltur.com/127148_las-ganancias-de-iag-se-disparan-en-2018-un-442-hasta-2897-m.html27 feb 2019
¡Fuera las casas de apuestas de nuestros barrios!
Este artículo podría haberse publicado en cualquier otro momento porque hubiera sido igual de actual y necesario, pero ha sido en este último año cuando se ha puesto sobre la mesa el debate y la preocupación acerca del aumento exponencial de casas de apuestas en los barrios.
Las casas de apuestas en cualquiera de sus vertientes (deportivas-futbolísticas, póker, blackjack…) se aprovechan del caldo de cultivo del desempleo juvenil, se nutren de la precariedad y la explotación de la juventud trabajadora en barrios obreros, con mensajes invasivos como “apuesta, apuesta, apuesta” y figuras públicas que despiertan simpatía como Carlos Sobera, promocionándose especialmente en canales como Neox, que tiene una amplia audiencia joven.
Puede que en el punto en el que se está, esos anuncios podrían rozar los límites de lo permitido, ya que se alteran por completo las condiciones materiales de las personas que entran en esas casas de apuestas online, llegándose al endeudamiento.
Por supuesto, todo ello con el beneplácito de los gobiernos, quienes nos han condenado a la más absoluta inestabilidad laboral con sus dos reformas laborales (de PP y PSOE) y planes de empleo deficientes, manteniendo estrechas relaciones con grandes empresarios y banqueros, y defendiendo sus intereses. El pueblo trabajador les importa bien poco.
De facto estas empresas fabricadoras de ruina nos plantean que no tenemos nada perder y todo por ganar, pero la realidad es bien distinta. Arriesgas todo, nos venden la moto de poder llegar a ser clase media, especular, porque ganarnos el dinero honradamente con nuestra fuerza de trabajo “ya no se lleva”. Este tipo de publicidad cala muchísimo en sectores castigados como el telemarketing o la hostelería, y especialmente entre las capas más jóvenes, quienes ven las apuestas como un método fácil y rápido de conseguir dinero, con una dinámica atractiva: apuestas 100 y ganas 200, pero que si sale mal te acabas arruinando.
También está el hecho de que muchas casas de apuestas hacen ofertas de comida y bebida para que la gente entre.
Los daños, por supuesto, no son sólo económicos, sino sanitarios y sociales.
Una solución efectiva ha planteado Albania, país que desde el 1 de enero ha prohibido las casas de apuestas en todo el Estado. Por su parte, en Extremadura han peleado y ya han conseguido que las casas de apuestas tengan que estar a un mínimo de 300 metros de cualquier centro de enseñanza, que la distancia mínima entre una casa de apuesta y otra sea de 250 metros y tengan control de admisión en la puerta, y que la recaudación de las sanciones o multas por incumplir el reglamento vaya destinada a prevenir y combatir la ludopatía.
No es la solución definitiva, pero sin duda es un paso. Sigamos su ejemplo.
Nos sumamos a la campaña de Coslada y suscribimos su mensaje “contra la heroína del Siglo XXI, contra el arrollador capitalismo que nos acerca cada día más a la miseria, por otro modelo de ocio para nuestra juventud… por muchos más motivos. #FueraCasasDeApuestasDeLosBarriosObreros”.
Nos sumamos a la campaña de Coslada y suscribimos su mensaje “contra la heroína del Siglo XXI, contra el arrollador capitalismo que nos acerca cada día más a la miseria, por otro modelo de ocio para nuestra juventud… por muchos más motivos. #FueraCasasDeApuestasDeLosBarriosObreros”.
La política institucional se olvida muy a menudo de la juventud, de la trabajadora y la estudiantil. Es preciso batallar por planes de empleo y formación, y también de cultura, deporte y ocio. Las casas de apuestas están envenenando a los jóvenes, y desde nuestra máxima solidaridad, apoyamos las iniciativas de organización vecinal para expulsarlas de nuestros barrios.
¡Por un modelo de ocio alternativo para la juventud trabajadora!
¡FUERA LAS CASAS DE APUESTAS DE LOS BARRIOS OBREROS!
Obreros eligiendo gobiernos ultras
La política supremacista entraña un ataque frontal a los derechos humanos. Se pasa de una tutela universal para garantizar derechos y libertades fundamentales de cualquier persona por el hecho de serlo, sin importar más atributos, a restringirlos solo para los titulares de un determinado Estado, siendo así que estos nacieron precisamente para poner límites al despotismo estatal.
<<Es sorprendente el número de tonterías que se pueden creer temporalmente
si se aísla uno demasiado tiempo del pensamiento de los demás>>
(Keynes. Teoría general).
Esta nota no pretende tanto descifrar porqué ganan las elecciones sujetos como Trump, Putin, Salvini, Bolsonaro o Viktor Orbán, sino porqué llegan al poder gracias al voto mayoritario de los trabajadores, teóricos representantes de la izquierda en el clásico reparto del mapa ideológico. También y en última instancia, intenta dilucidar cómo funcionan las responsabilidades compartidas por el alunizaje. Es decir, a quién es imputable semejante desaguisado.
Hasta ahora la izquierda se ha limitado a poner el grito en el cielo, habida cuenta de su incapacidad para asaltarlo. Ha bufado contra la llegada al gobierno de formaciones ultranacionalistas. Sin más argumentario ni reflexión. Solo blandiendo el toque a rebato “que vienen los fachas”. Salvo los recalcitrantes del socialismo científico, que han desempolvado el viejo dogma victimista sobre el fascismo como último recurso del capitalismo para justificar lo que no comprenden. Relato desmentido por los hechos y la ciencia política ad calendas graecas. Al menos desde que el neomarxista Friedrick Pollock, fundador de la Escuela de Franckfurt, arrumbara esa tesis. En su ensayo Is National Socialism a New Order revelaba al respecto que “casi todas las características esenciales de la propiedad privada habían sido destruidas por los nazis” (Martin Hay. La imaginación dialéctica. Pág. 255). Ya Marx, en carta a César de Paepe de 18 de diciembre de 1870, había advertido sobre este tipo de avatar: “Es necesario que los acontecimientos pongan fin de una vez por todas a ese culto reaccionario del pasado”.
Quizás por esa falsa percepción de la realidad la posición de clase es ambivalente en su respuesta al fenómeno. Se mueve, ora entre la radical denostación, ora en un temerario respaldo. El primer caso vendría ejemplificado por la emergencia en España del partido Vox, de firmes resonancias ultras, en Andalucía, una de las circunscripciones con mayor paro de Europa. El segundo tiene que ver con la entrada en el gobierno italiano de la coalición representada por el Movimiento 5 Estrellas de Luigi di Maio y la Liga de Mateo Salvini, uno y otra formaciones populistas bipolares. Aquí, la novedad ha sido que algunos de los prohombres de la órbita comunista hayan saludado las medidas sociales del ultra Salvini (Decreto Dignidad) como un triunfo de la clase trabajadora, dicho sin mayores reparos.
Parecida hibridación se observa en la perspectiva histórica. El paradigma que catapultó al fascismo y al nazismo de entreguerras no es el que surge ahora en occidente con el encumbramiento de partidos de corte xenófobo. Es cierto que el doble crac económico (1929 y 2008) ha funcionado como fermento en los dos supuestos. No lo es sin embargo que exista un mimetismo ideológico entre lo que supusieron aquellos movimientos totalitarios y los experimentos ultranacionalistas actuales. Tampoco la secuencia en que se produjo la deflagración social consiguiente. Entonces las poblaciones afectadas venían de una era de vacas flacas y de la Gran Guerra, y ahora por el contrario claman por la prosperidad perdida tras más de medio siglo de paz social. Por otra parte, el patrón involucionista de los países del antiguo bloque soviético (Hungría y Polonia sobre todo), los que iniciaron la saga-fuga, responde a circunstancias específicas. Su código fuente es diferente.
Ese puzle comprende, no obstante, un mismo marco de referencia que enlaza ambos acontecimientos. Es la “rebelión de las masas” que identifica el proyecto común antiliberal de principios del siglo XX y al del primer tercio del XXI. Los mismos contingentes que han celebrado y disfrutado de la sociedad de consumo y del Estado de Bienestar son los que ahora, en época de precariedad, buscan respuestas a sus demandas fuera de sus tradicionales inclinaciones políticas. Agua y aceite, en principio, que las agravadas mutaciones económico-sociales aproximan. Como si la categorización marxista de estructura y superestructura operara también sobre la clase trabajadora, sacrificando convicciones ideológicas por la base material de su existencia. Albarda sobre albarda, el asalariado (homo económicus) ha devorado al trabajador (homo faber), dejándole sin atributos. Nada que ver con aquel internacionalismo obrero originario orgulloso de su autonomía (“emancipación de los trabajadores ha de ser obra de los trabajadores mimos”) y consciente de su responsabilidad histórica (“no más deberes sin derechos, ni más derechos sin deberes”). Un corrimiento de opciones, pues, que comunica a los votantes de izquierda con los planteamientos de las formaciones populistas. La gravedad de esta abducción está en su carácter estructural no contingente. El sincretismo en marcha exige dar la espalda al internacionalismo solidario como seña de identidad de la izquierda y abrazar la formulación “los nacionales primero” que define a los grupos xenófobos.
La política supremacista entraña un ataque frontal a los derechos humanos. Se pasa de una tutela universal para garantizar derechos y libertades fundamentales de cualquier persona por el hecho de serlo, sin importar más atributos, a restringirlos solo para los titulares de un determinado Estado, siendo así que estos nacieron precisamente para poner límites al despotismo estatal. Es lo que la politóloga Hannah Arendt calificó como “aporía de los derechos”. Lo vemos en lo que actualmente está sucediendo respecto a la acogida de migrantes y refugiados. En un lado, y a favor de su protección, pugnaría el clásico internacionalismo solidario de la izquierda, y en el otro la tentación reaccionaria de rechazo a unas personas que se las presenta como competidoras en cuanto a la utilización de los recursos disponibles, deshumanizándolas en su tipificación (ocurrió en el pasado con los judíos como chivos expiatorios). El euroescepticismo del gobierno Salvini en lo económico implica una negación de la protección de los Derechos Humanos que la Unión Europea garantiza en sus tratados y tribunales superiores de justicia.
Por tanto hay dos puntos iniciales de encuentro entre esos actores en principio antagónicos (unidad de los contrarios). La prevalencia de lo económico-material sobre lo ideológico-cultural, y el relanzamiento del espacio Estado-nación como “democracia de proximidad”. Ambas variables albergan una traza que permea el eje izquierda-derecha como fuerzas paralelas que se tocan en el infinito. El materialismo descarnado como principio fundante atraviesa al marxismo (versión histórico y/o dialéctico), y al capitalismo (modalidad utilitarista). Una realidad intelectual que adquiere dimensión pragmática cuando la multitud asalariada de la sociedad neoliberal toma conciencia de que los males que le aquejan proceden de las organizaciones supranacionales que han impuesto las políticas austericidas. Este es el “kairós” que favorece a los grupos extraparlamentarios (y por tanto no contaminados por las instituciones) para ofrecer su mercancía: mano dura contra el sistema y empoderamiento del Estado-nación como herramienta para la acción legal.
Otros dos factores intervienen también en el derrapaje de esa izquierda para cebar el nacionalismo xenófobo. Uno es la desafección unidimensional de la globalización, sin matices, confundiendo lo que es solo una etapa más del imperialismo capitalista con formas de humanismo integral. En ese tirar el niño con el agua sucia se han contaminado peldaños que jalonan el proceso civilizatorio. Las “globalizaciones positivas” institucionalizadas, sobre todo después de los actos de barbarie estatal perpetrados durante la Segunda Guerra Mundial, para que “nunca más” reinara el horror como arma política en el concierto mundial. Hablo de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre adoptada por la ONU en 1948 y sus secuelas el Pactos Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; de la Convención Europea de Derechos Humanos adoptada por el Consejo de Europa en 1950; del Tribunal de Justicia Europeo de Derechos Humanos de 1959, entre otras. Algunas de estas prerrogativas de protección urbi et orbi se ven amenazadas, si no directamente conculcadas, por las consignas populistas de los “nuestros primero”. Tal es el día a día de los gobiernos ante la tragedia de la emigración forzosa, al anteponer el nacionalismo gregario al internacionalismo solidario por las urgencias del cortoplacismo electoral. Una conducta que sigue la práctica de los gobiernos en sus relaciones exteriores. Igual que hubo una confesionalidad extrema que obligaba a los vasallos en la fe de sus señores, la convención pide expurgar la ética de la agenda diplomática. Business manda. Lo acabamos de ver en el caso del viaje a Cuba de Sánchez esquivando a la disidencia y a Marruecos para fijar tarifa con Mohamed VI por enjaular a los sin papeles que devuelve Moncloa; el besamanos del Rey Emérito Juan Carlos I al príncipe saudí que ordenó asesinar y descuartizar al periodista Khashoggi; o la humillante genuflexión de las autoridades españolas durante la recepción al presidente chino Xi Jimping, El envés está en las “injerencias humanitarias” que se hacen en defensa de los derechos humanos en países de segundo o tercer orden, un régimen que ha hecho de la represión indiscriminada su baluarte.
A lo anterior hay que añadir el gradiente de la “razón de Estado”, un remedo de aquel hegelianismo de izquierda y hegelianismo de derecha que fecundó a muchas mentes militantes de la generación de entreguerras. La mitificación del Estado como elemento transformador está en el tuétano de las dos culturas. Esa es una de las razones que explica el curioso trasvase de voluntades de una orilla a otra. El Estado intervencionista así tomado era el deus ex machina que animaba a comunistas y fascistas de la vieja escuela, y de casta le viene al galgo. No es una anécdota, aunque tampoco conviene sacarlo de contexto, que el primer país en aplicar la teoría keynesiana de maximización del gasto público para combatir la depresión fue la Alemania de Hitler con su movilización general. Y aunque algo intuyo al final de sus días, ni en las peores pesadillas hubiera supuesto el autor de la Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero que andando el tiempo la China ordocapitalista-ultracomunista sería, mutatis mutandis, su alumno más aventajado (3,9% de paro, a la zaga del 3,7% de EEUU). Lo de los años treinta del siglo XX se etiquetó como nacionalsocialismo y lo que hoy despunta aparece como una socialización nacionalista. La negativa de Trump a ratificar los acuerdos de la Cumbre del Clima sería el episodio más bestial de ese proteccionismo distópico, al poner en peligro la salud y la seguridad de la población mundial (incluida la estadounidense) con la excusa de fomentar el empleo propio y hacer competitiva la economía nacional.
Hasta llegar a la actual confluencia ha habido una lenta pero eficaz labor de zapa intelectual. Términos como “liberal” y “democracia”, matriz conceptual de los derechos humanos, han sido objeto de ataque y cuestionamiento al alimón por derecha e izquierda. El mismo Marx puso en solfa a la democracia como un espantapájaros utilizado por la burguesía (alienación de la sociedad civil) en su estratagema de dominación (el consentimiento de los gobernados). Incluso en sus obras de juventud. Ya en El manifiesto comunista (1848) podía leerse: “una parte de la burguesía desea mitigar las injusticias sociales para de este modo garantizar la perduración de la sociedad burguesa”, y “vuestro Derecho no es más que la voluntad de vuestra clase elevada a ley: una voluntad que tiene su contenido y encarnación en las condiciones materiales de vida de vuestra clase”. Es remotamente posible que esta reticencia del “socialismo real” a sancionar el “derecho a tener derecho” influyera para que el bloque soviético se abstuviera a la hora de ratificar la Declaración Universal de Derechos Humanos propuesta por la ONU. Por lo demás, la presente refutación del “neoliberalismo”, lejos de significar un rechazo de un capitalismo salvaje sin medida ni control, ha terminado contaminando expresiones como “liberal” y “libertad”, que nacieron a la vida común como atributo de la autonomía de la persona, en el segundo ejemplo, y como banderín de enganche para combatir al feudalismo. Un claro abuso de metonimia identitaria cuya onda expansiva alcanza al individuo escarnecido del sujeto. Lo democráticamente correcto hoy pivota sobre lo colectivo-comunitario. El dictum “una persona es ella misma si y mientras se experimenta como como tal” de Locke cae en tierra baldía.
La dinámica en el polo opuesto bebe en la doctrina “amigo-enemigo” de Carl Schmitt, cerrando el círculo vicioso que corteja ambas filiaciones ideológicas. El eslogan “los nuestros primero” de las formaciones ultras que atrae a tantos votantes procedentes de la izquierda, se realiza y concreta en el repudio de migrantes y refugiados vistos como invasores. Son apátridas, gentes sin Estado, y por tanto carentes de los derechos de ciudadanía que conlleva la asunción reduccionista de la normativa universal, seres superfluos. Conviene recordar que Schmiit se ha convertido para muchos pensadores neomarxistas (el ex maoísta Alain Badiou y el lacaniano Slajov Zizek, entre otros) en un filón temático con que relanzar sus tesis revolucionarias de la “hipótesis comunista”. Un atajo que recuerda a las reiteradas apelaciones de Salvini, Le Pen y otros caudillos populistas a una “democracia directa” (con un “referéndum” consumó Putin la anexión ilegal de Crimea a Rusia), tan paternalista y plebiscitaria como intuitiva, en contraposición a la “democracia representativa” (liberal y burguesa), como muestra de la legitimidad que les prestan unas masas infantilizadas.
Los obreros eligiendo gobiernos ultras es como los pajaritos disparando a las escopetas.
El beneficio de Aena se dispara por el fuerte crecimiento del tráfico aéreo
Aena ha alcanzado en 2018 un beneficio neto de 1.327,9 millones de euros (+7,8%), impulsado por la evolución positiva del negocio, el sólido crecimiento del tráfico aéreo y una disminución del gasto financiero.
Durante el ejercicio, el gestor aeroportuario obtuvo ingresos totales consolidados de 4.320,2 millones de euros (+7,3%), en los que destacan los ingresos procedentes de las áreas comerciales de los aeropuertos españoles que alcanzaron 1.162,4 millones de euros (+9,6%), cifra que supone el 26,9% del total.
El beneficio bruto de explotación (EBITDA) en 2018 ascendió a 2.656,6 millones de euros, un 5,5% más que en el ejercicio anterior.
La generación de caja de la compañía (cash flow) alcanza los 1.947,7 millones de euros (-3,3%) frente a los 2.014,6 millones de euros de 2017, afectado principalmente por el cobro en 2017 de la devolución del impuesto sobre sociedades correspondiente al ejercicio 2015 (110,5M€). Excluidos estos impactos extraordinarios, el flujo de caja operativo aumenta un 3,8%.
La deuda financiera neta se sitúa en los 6.654,1 millones de euros frente a los 7.156 millones de euros al cierre de 2017. La ratio de deuda financiera neta EBITDA desciende de 2,8 en 2017 a 2,5 veces a 31 de diciembre de 2018.
Ante los buenos resultados, el Consejo de Administración de Aena ha acordado proponer a la Junta General Ordinaria de Accionistas la distribución de un dividendo de 6,93 euros brutos por acción, con cargo a los resultados de 2018, lo que supone un incremento del 6,6% frente al del ejercicio anterior.
Récord en el tráfico de pasajeros
En cuanto al tráfico de pasajeros registrado por los aeropuertos de la red de Aena en España durante 2018, la cifra se situó en 263,8 millones de viajeros (+5,8%). Destaca la importante contribución del tráfico internacional, que representa alrededor de un 70% del total y crece un 4,1%, y el aumento del 10% del tráfico nacional.
Incluyendo los datos del Aeropuerto de Luton, la cifra de pasajeros gestionada por Aena asciende a 280,3 millones (+5,8%). En 2018, la instalación londinense registró 16,6 millones de pasajeros (un 5% más).
https://www.hosteltur.com/127120_el-beneficio-de-aena-se-dispara-por-el-fuerte-crecimiento-del-trafico-aereo.html
26 feb 2019
Oleada de despidos en las grandes empresas
Trabajadores de Alcoa protestan por los despidos en Avilés |
Miles de trabajadores serán echados a la calle en 2019, víctimas de los ERE que llevarán a cabo grandes empresas y multinacionales como Caixabank, Vodafone Alcoa, Cemex o Ford, a los que habría que sumar los despedidos el año pasado.
Caixabank, que obtuvo un beneficio de casi 1.700 millones en 2017 pero está decidida a reducir su número de oficinas bancarias, podría despedir a un 5,4% de sus 37.000 trabajadores, lo que supondría unos 2.000 despidos.
Vodafone, que en el primer semestre de 2018 ingresó un 4,7% menos que en el mismo periodo del año anterior, podría expulsar a un cuarto de sus 5.000 trabajadores, lo que supondría unos 1.200 despidos.
Ford despedirá a trabajadores de la planta valenciana de Almussafes (donde trabajan 7.000 de los 10.000 trabajadores de la automovilística en España), aunque se desconoce el número concreto despidos, que afectarán a las fábricas de toda Europa. El objetivo es ganar más dinero, pese a que sólo en nuestro país obutvo 1.119 millones de beneficio en 2017.
Alcoa, que obtuvo un beneficio de 217 millones en 2017, podría despedir a un 40% de sus 1.800 trabajadores, lo que supondría unos 700 despidos (que afectarían a los de las plantas de A Coruña y Avilés, mientras que los 1.100 asalariados de la planta lucense de San Cibrao se librarían en principio de la quema).
https://www.publico.es/economia/despidos-empresas-multinacionales-2019-ere.html
25 feb 2019
Aena tendrá que pedir una moratoria para alcanzar los estándares que exige AESA
Para la evaluación de la competencia, ante la certificación de los aeropuertos
Tras el cuarto año de su privatización, Aena distribuirá entre sus accionistas 1.500 millones de euros
Cuatro años privatizada y cuatro años “suspenso” en la formación de Aena
Cuatro años desde la salida a bolsa de Aena, cuatro años denunciando el expolio y recordando a quien quiera escuchar que la privatización de Aena solo ha beneficiado a los fondos de inversión y grandes accionistas. El capitalismo de amiguetes imperante que nacionaliza pérdidas y privatiza beneficios, como ejemplo de justicia social, es el encargado de gestionar la agenda. Nadie defiende lo expoliado al ciudadano y se renuncia a una gestión por lo público y lo social, en beneficio de los dividendos a los accionistas, que recordemos que se espera que repartan 1500 millones de euros con cargo al ejercicio de 2018 y que por otro lado, por ahora no ha sido posible, que el Congreso de los diputados se plantee tan siquiera, una comisión de investigación del expolio y mala venta de Aena.
Cuatro años donde a los trabajadores aeroportuarios, solo se les reparte más precariedad, unos por la política comercial y de gestión de Aena, con la reducción “temeraria” de los contratos, otros por su política de los recortes por los recortes. En el caso del personal en propio, un ERE se llevó a 1200 trabajadores y todavía no ha dado signos Aena de que tenga intención de modificar la congelación impuesta a las plantillas.
Cuatro años desde la salida a bolsa de Aena, y a la falta de plantilla hay que resaltar que como consecuencia de las denuncias sobre formación presentadas por la Representación Laboral en 2015, 2016, 2017 y 2018, y que motivaron que la Fundación Estatal para la Formación en el Empleo (FUNDAE) retirase a Aena todas o parte de las bonificaciones recibidas por formación de esos años, y además la Representación Laboral de la Comisión Paritaria de Formación (CPF) decidió no aprobar ni validar el Plan de Formación para el ejercicio 2019, podemos decir que la formación en Aena no es la adecuada ni suficiente.
Si Aena está obligada a poner en práctica un programa de formación para el personal involucrado en la operación, el salvamento y la extinción de incendios, el mantenimiento y la gestión del aeródromo, a fin de que el personal del aeropuerto cuente con la suficiente experiencia y formación para desempeñar sus funciones (Reglamento (UE) nº 139/2014), y si la formación en Aena no ha superado, desde su salida a bolsa, de forma parcial o total la idoneidad de los planes de formación, mucho nos tememos que Aena tendrá que pedir una moratoria para alcanzar los estándares que exige AESA para la evaluación de la competencia, ante la certificación de los aeropuertos.
CGT ya alertó sobre la necesidad de poner en práctica un programa de formación adecuado, así como de la necesaria plantilla, para que con la correspondiente programación dentro de la jornada laboral, se permita conciliar por un lado, los requerimientos de seguridad operacional de manera continua, y la vida social y familiar de las trabajadoras.
Recordando el 4 aniversario de la privatización de Aena, el sindicato CGT realizó una concentración en la T2 del Aeropuerto de Barajas, el pasado 14 de febrero, reivindicando los siguientes puntos:
- Por la erradicación de la temporalidad y contra la precarización creciente de las condiciones de trabajo en los Aeropuertos, fruto del trasvase de rentas que está produciendo la escandalosa política de dividendos de Aena y su política de contratación a la baja.
- Por la recuperación de la calidad y la seguridad operacional. Contra la precariedad laboral, el abaratamiento y el deterioro del servicio en los Aeropuertos, Aena, y el Sector Aéreo.
- Por la gestión del Sector Aéreo, de Aena, y los Aeropuerto en interés y beneficio general. Por lo público y lo común y contra su privatización y expolio, y contra las maniobras y planes especulativos que perjudican a trabajadores y usuarios.
CGT - aena ENAIRe
Los salarios de los españoles están igual ahora que hace veinte años
Los salarios medios de los españoles están exactamente igual que hace veinte años, según los datos aportados por un estudio del Banco de España que analiza la moderación salarial en nuestro país en comparación con la Unión Económica y Monetaria Europea (UEM).
El informe recoge un gráfico con la tasa de crecimiento interanual de los salarios y la tasa de paro entre el primer trimestre de 1998 y el segundo de 2017, últimos datos analizados. La diferencia entre el de España y el de la UEM es evidente: mientras que en el continente ambas cifras son relativamente estables, en España fluctúan.
"Se puede apreciar que, mientras los crecimientos salariales fueron más marcados en España que en la UEM entre 2003 y la primera parte de 2009, en España se han producido desaceleraciones más elevadas durante la crisis financiera global que en la UEM, observándose incluso tasas negativas en el crecimiento nominal de los salarios", indican los autores, Pilar Cuadrado y Federico Tagliati. "La tasa de desempleo tuvo un marcado incremento en España en los años de la crisis económica, si bien se observa una caída sustancial a partir del tercer trimestre de 2013".
En rojo y en la columna de la izquierda puedes ver la tasa
de paro en España y en la UEM. Mientras que en la UEM se mantiene estable entre
el 8% y el 12,7%, en España llega hasta el 27,1% de marzo de 2013. Por otro
lado, solo entre finales de 2005 y principios de 2008 disfrutamos de tasas
similares a la de la UEM. Entonces, la tasa de paro estaba entre el 8% y el 9%.
Con la crisis se disparó y actualmente está en un 15,2%. El gráfico mide solo
hasta junio de 2017, cuando estaba dos puntos por encima (17,3%).
Las líneas azules muestran la evolución de la tasa de
crecimiento interanual de los salarios medidos a través de la remuneración por
asalariado y tomando como punto de partida marzo de 1998 (0%). Tras dos décadas
de fluctuaciones en los que la tasa subió y bajó mucho más que en el conjunto
de la UEM, en junio de 2017 España volvía al punto de partida, esto es, a tener
el mismo salario medio que en 1998.
"En ambos casos, la reducción de la tasa de paro a
partir de 2013 no parece venir acompañada de un aumento en la tasa de
crecimiento salarial", dice el estudio.
¿Por qué no suben los salarios? Una de las hipótesis que
manejan los autores es la flexibilidad en el mercado laboral, que
"facilita cambios en las horas trabajadas y en la transición de la
inactividad al empleo sin pasar por el desempleo".
Los contratos a tiempo parcial no deseados (es decir: el
trabajador trabaja menos de 30 horas por semana porque no le queda otra, cuando
estaría dispuesto a trabajar más horas) parecen ser otra razón. En otro de los
gráficos, el estudio compara el porcentaje de población activa
"involuntariamente parcial" y, como se observa, de nuevo la tasa
española es muy superior a la de la UEM.
Crónica de un domingo de mierda en un trabajo de mierda
Cuando el juego ejerce de tentación ante la cruda realidad de la precariedad laboral
Son las 11 de la mañana y esperamos junto a la puerta hasta que quede el último minuto para entrar. Apuramos el cigarro porque desde hace tiempo hemos decidido que no le regalamos ni un segundo a esta empresa. Mientras unos miran el móvil yo les observo. Pienso que están ojeando Facebook o Instagram. Sin prestar atención, simplemente por mirar. Desde siempre se me ha ido la vista hacia los móviles ajenos, sin ningún tipo de interés en lo que me pudiera encontrar, solo un acto reflejo. Veo un fondo verde, demasiado llamativo, y con letras amarillas: una app de apuestas. Nunca perder dinero había sido tan fácil.
Cierra esa mierda, le digo. Ya saben mis compañeros el odio que le tengo a ese tipo de prácticas y la brasa que les doy cada vez que lo veo. “Que estoy mirando resultados, además no tengo dinero en la cuenta”, me contesta guardando el móvil. Lo mismo te sirve de diario deportivo como de fondo de inversión. Ya llegamos tarde, entre el cigarro y las apuestas se nos ha ido el santo al cielo. Nos quedan 10 horas por delante en un centro comercial, un domingo que nos pagan al mismo precio que el resto de días. Igual eso de las apuestas tampoco es tan loco, todo sea por dejar esto.
Aunque cada mañana del último día de la semana te levantas pensando que ya queda menos para no volver más, según avanza el día te quedan hasta ratos para pasártelo bien. Entre risas y tertulias siempre aparece Pedro con la alegría que nos falta a todos para ofrecernos echar la primitiva. ¿Otra vez?, pienso yo. Ya la echamos la semana pasada y no tocó nada, vaya forma de tirar el dinero. “Chica, que es un euro, cuando nos toque ya llorarás”, me dice mientras ríe. Esta vez no participo, me parece una pérdida de tiempo. Pero hay semanas que sí, que sí lo hago, me dejo hasta cinco euros con un sentimiento de culpa horrendo pero con la esperanza de que algo pueda pasar.
Es la hora de la comida, en ese momento sabes que la mitad de la jornada está hecha, que a poco que tengas un par de clientes y la jefatura no esté muy presente es cuestión de coser y cantar. Entre broma y con algún toque trapacero acabamos saliéndonos con la nuestra y el grupo que mejor relación tenemos conseguimos comer a la misma hora. El bar de enfrente siempre es buena opción, no hay mucho más cerca y la relación con los camareros es tan buena que cualquier otra alternativa podría considerarse casi como una traición al local.
Con el dinero de las vueltas Juan siempre hace lo mismo. Lo que antes dejaba al camarero ahora se lo entrega sin pensar a una máquina tragaperras. “¡Qué son 20 céntimos! Para perderlos en el bolsillo los invierto”. Las apuestas convertidas en una operación financiera. Les repito que esa mierda va a acabar con ellos, que la banca siempre gana y una ristra de argumentos que ignoran sin pestañear. “¿Cómo me van a arruinar si no tengo ni un euro?”, me dice mientras sonríe sin mirarme. “Te van a endeudar”, pienso yo, como a tantos y a tantos otros han arrastrado esto ya.
Cada fin de semana la misma conversación. Cada fin de semana mi desesperación por hacerles entender y su esperanza por triunfar. Y yo solo me acuerdo de Antonio y su cara descompuesta cuando hace dos años perdió mil euros que luego pudo recuperar.
Abrí la puerta, no me hacía gracia aquel sitio pero las copas eran muy baratas y, antes de salir, la juventud del barrio nos reuníamos ahí. Le vi con la cara hasta el suelo y los ojos en otro lugar. Después de una hora consiguió su dinero y casi a gritos me lo llevé al cajero. Guárdalo todo, le dije, pero ni ese susto le impidió guardarse 50 euros para continuar. Después de media hora lo volvió a perder todo en la ruleta. Fue el valor de una trabajadora que arriesgando su puesto le dijo que no le daba ni un euro más. Mientras ella estuviese ahí no iba a contribuir a que alguien que podría ser su hijo se jodiese la vida de esa forma.
Antonio no volvió a jugar, pero cuántos continúan en su lugar. Cuando crees que no tienes nada que perder te arrojas a los brazos de lo que sea. Sobre todo cuando aquel reposo te promete más de lo que un Estado te puede garantizar.
https://www.elsaltodiario.com/casas-de-apuestas/cronica-domingo-mierda-trabajo-mierda
24 feb 2019
GALERIA DE BUITRES CDXCVIII
Las empresas del Ibex35 ganaron en 2017 un 16,2% más pero aportaron un 11% menos
Mientras que los beneficios de las empresas que cotizan en el Ibex35 crecieron un 16,2% durante 2017, estas mismas compañías aportaron un 11% menos que el año anterior mediante el impuesto de sociedades. Así lo recoge el informe Reparto desigual. Cómo distribuyen valor las empresas del IBEX 35, en el que Oxfam Intermón realiza un anáilsis de las prácticas fiscales de las grandes empresas de nuestro país. Entre los datos destacados resalta uno: desde 2007, el Impuesto de Sociedades recauda un 48% menos a pesar de que en este mismo periodo las ganancias de las principales compañías han crecido un 25%. Desde la organización denuncian que “este hecho tiene un impacto directo en la financiación de servicios y políticas públicas como sanidad y educación” y provoca “un incremento de la desigualdad”.
Estos beneficios tampoco han repercutido en materia salarial para los trabajadores y trabajadoras. Entre 2008 y 2017, los salarios cayeron, en general, un 4,2%, mientras que los sueldos de los miembros de los diferentes consejos de administración y de los altos cargos no han dejado de crecer. Según los datos aportados en el informe, un primer ejecutivo de una gran empresa gana 132 veces el sueldo medio de la compañía y 301 veces el sueldo más bajo. Desde 2016 a 2017 la remuneración media de los principales cargos ha crecido 5 veces en estas empresa.
Si atendemos a los salarios medios de las 35 empresas del IBEX, han aumentado un 1,6% en 2017, es decir, tres veces menos que la productividad, que creció un 4,8% en el mismo periodo. Sin embargo, el crecimiento de los sueldos de los miembros de los consejos de administración, por su parte, fue de un 16,3%. En ACS, por ejemplo, su máximo responsable gana 627 veces el sueldo medio de la empresa, seguido de Inditex (561 veces), Acciona (438) y Abertis (425).
Si realizamos una comparativa entre el 10% que más gana y el 10% que menos gana, la desigualdad no ha parado de incrementarse: mientras que en 2007 la diferencia era de un 5,88%, en 2017 alcanzó el 7,21%. Hace unos meses, Comisiones Obreras recogía en la IV edición del Informe sobre retribuciones del sector financiero español que el sueldo de los directivos de la banca supone el 11% de los gastos de personal a pesar de que solo ocupan el 1,5% del personal. “Una minoría privilegiada vio aumentar sus rentas mientras que el ajuste se trasladó a la gran mayoría”, denuncia Oxfam Intermón.
Pero también el accionariado ha ganado más durante estos últimos años, concretamente un 15,5% más. Incluso durante los años más duros de la crisis, los dividendos no dejaron de crecer. En 2009, por ejemplo, se repartió un 28,3% más que el año anterior a la crisis (2007). El récord se alcanzó en 2014, un año en el que las empresas destinaron el 34,3% de su beneficio a repartirlo a sus accionistas, una cantidad sin precedentes ya que, según Oxfam Intermón, “lo habitual en años anteriores y posteriores es que estuviera entre el 25 y el 28%”.
Los consejos de administración
Según el informe, “el rechazo de los accionistas de las empresas del Ibex35 a los sueldos de sus consejeros va en aumento, aunque todavía sea algo minoritario”. Así, en Merlin Properties, ACS, Grifols y Melià Hotels, más del 30% de su accionariado votó en contra del informe de retribuciones.
Desde Oxfam critican la endogamia de los consejos. “En el 83%, es decir, en 29 de las 35 empresas hay un consejero que también ocupa un asiento en el consejo de otra empresa del Ibex. Esto revela lo reducido que es el círculo de poder de las grandes empresas y pone en entredicho su independencia”. Las compañías más endogámicas son Naturgy, con 6 miembros repetidos, Bankia, (5), CaixaBank (4), Endesa (4) y Repsol (4).
La igualdad sigue siendo otro importante tema pendiente. Durante 2017, las mujeres solo representaban el 23% del total de los miembros de los diferentes consejos, es decir, 105 de un total de 447 consejeros. Recientemente, la salida de Ángel Acebes del consejo de Iberdrola ha colocado a la eléctrica como la empresa con mayor proporción de mujeres en este órgano. Sin embargo, “al ritmo al que han ido incorporando mujeres a puestos directivos las empresas del Ibex desde 2010, no habrá paridad en cargos ejecutivos de estas empresas hasta dentro de 830 años”, señala José María Vera, director general de Oxfam Intermón.
Paraísos fiscales
2017 fue el segundo año consecutivo en el que las empresas del Ibex35 redujeron su presencia en paraísos fiscales. A pesar de ello, todavía mantienen 858 filiales, estando la mitad de ellas en Delaware. Dentro del propio grupo de las 35 más importantes, asegura Oxfam, también hay diferencias importantes: mientras que Banco Santander tiene 207 filiales en paraísos fiscales, es decir, casi la cuarta parte del total, otras como Aena, Bankia, Inmobiliaria Colonial y Merlin Properties no cuentan con ninguna. A Banco Santander le siguen ACS con 109 y Repsol con 81. Al ritmo que van, se tardaría un total de seis años en liquidar la presencia de empresas del Ibex35 en este tipo de territorios.
Desde Oxfam aseguran que “el número de filiales del total de empresas en paraísos fiscales todavía sigue siendo muy abultado, la transparencia aún resulta incompleta y la mayoría de los avances se dan por parte de un reducido grupo de empresas”.
Medidas para revertir la situación
En el informe también se encuentran algunas claves para acabar o, al menos, paliar la situación de desigualdad que se vive dentro de las grandes empresas. Así, Oxfam asegura que se deben adoptar medidas para alcanzar un nuevo modelo económico “que responda a los intereses de la mayoría de la población”: “Con el 11% de menos que las empresas del Ibex aportaron en 2017 (respecto a 2016) a la Hacienda Pública, se podría haber duplicado el número de hogares sin ningún tipo de ingreso que acceden a una renta mínima de inserción”, denuncian. Por ello creen que “es imprescindible una reforma del sistema fiscal para acabar con el fraude, la evasión y la elusión fiscal, que garantice que las grandes empresas y las personas más ricas paguen lo que les corresponda”.
La organización también pide mayor trasparencia empresarial, garantizar salarios dignos (alcanzando un Salario Mínimo Interprofesional de 1.000 euros en 2020) y aplicar un enfoque de género “que favorezca la igualdad de oportunidades y elimine la brecha salarial”.
https://www.yoibextigo.lamarea.com/informe/noticias/blog/las-empresas-del-ibex35-ganaron-en-2017-un-162-mas-pero-aportaron-un-11-menos/
21 feb 2019
GALERIA DE BUITRES CDXCVII
Rodolfo Martín Villa: el hombre del traje gris o la porra de la Transición
Son ellos, los “hombres grises”, los que hacen funcionar de forma eficiente todas las dictaduras, tiranías o autocracias. En el cuento de Michael Ende Momo, los hombres grises roban el tiempo de la gente y se lo fuman. En el 1984 de George Orwell, los hombres grises sostienen y organizan la burocracia represora del "Gran Hermano". Al presenciar el proceso contra el organizador nazi Eichmann, Hannah Arendt describe a todos esos hombres grises que trabajan dentro de la máquina del mal, la de asesinar, como tipos corrientes y banales, aburridos y rutinarios.
Martín Villa es el ejemplo español de este “hombre gris” o gris “perla”. Será de estudiante Jefe Nacional del SEU (sindicato estudiantil falangista), procurador de las Cortes Franquistas, Senador por designación Real, Ministro de Relaciones Sindicales en el 75, Ministro del Interior del 76 al 79 durante el gobierno de Adolfo Suarez, Vicepresidente del Gobierno del 81 al 82. Luego Diputado del 79 al 83 y del 89 al 87 por el Partido Popular y luego "Comisionado del Gobierno para las actuaciones derivadas de la catástrofe del buque Prestige" durante el gobierno de José María Aznar y luego Presidente de Endesa del 97 a 2002 y luego presidente de Sogecable hasta el 2010 y luego... Martin Scorsese, en Goodfellas, hubiera dicho que era “uno de los nuestros”.
Se hizo la transición y aparecieron en el NODO y en los Consejos de Ministros hombres que no había nombrado Franco o el aparato franquista, pero de los directores generales para abajo, más todo el ejército, las policías, la Guardia Civil, los jueces y fiscales no solo habían jurado fidelidad al régimen franquista por puro “formulismo obligatorio” sino, salvo honrosas excepciones, porque creían y sentían suyo aquel aparato monstruoso que había funcionado bien engrasado durante cuarenta años, propiciando a partir del 78 el “que todo cambie para que nada cambie”. Y al frente de este aparato policial represor aún franquista, sabiendo perfectamente quienes eran las personas que trabajaban en él (el torturador Billy el Niño y similares), estaba Martin Villa.
Conviene saber que dentro de la policía o la judicatura no se hizo “transición alguna”. Conviene aclarar que solo la edad, la jubilación, el tiempo, fue retirando de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, del ejército, del cuerpo de jueces y fiscales, de los altos funcionarios del estado a miles y miles de franquistas que renegaban de cualquier tímida democracia, que aborrecían de las libertades o de cualquier partido de izquierda o cualquier sindicato que no fuera el “Vertical”. Y cuando se jubilaron nadie les pidió cuentas de sus actos y sus enjuagues, sus torturas o sus crímenes, recibieron sus trienios y pensiones, sus homenajes y sus medallas, protegidos por una ley de amnistía hecha a medida.
La jueza Argentina María Selvini, instructora de la causa penal contra el franquismo, y basándose en el principio de justicia universal, envió una orden de detención internacional contra Martín Villa y diecinueve dirigentes de la dictadura franquista, solicitando su extradición con el objetivo de interrogarles en el marco de la causa 4591/10 por los delitos de genocidio y/o crímenes de lesa humanidad cometidos en España por la dictadura franquista entre el 17 de julio de 1936 y el 15 de junio de 1977. Nadie molestó a Rodolfo, ni a Billy el niño, ni a nadie de los de entonces porque era y son, ya lo dijimos, citando la célebre película de mafiosos de Escorsese, “uno de los nuestros”. Conviene recordar que el rey Juan Carlos I condecoró a Martín Villa que durante el ejercicio de sus responsabilidades entre 1976 y 1979 y que durante ese periodo hubo 35 muertos por disparos de la Policía Armada, Guardia Civil y grupúsculos de extrema derecha.
Si Torrente era “el brazo tonto de la ley”, nuestro Rodolfo era conocido popularmente como «la porra de la Transición», debido a la extrema dureza que aplicaban las fuerzas de seguridad para reprimir manifestaciones estudiantiles, obreras o de cualquier tipo. Conviene recordar a modo de ejemplo que a sus órdenes seguía el comisario Roberto Conesa, famoso durante el franquismo por su habilidad como torturador sistemático de sindicalistas, estudiantes y militantes de partidos de izquierda. Durante su etapa como ministro jefes de la franquista Brigada Político-Social seguían dirigiendo nueve de las trece jefaturas superiores de policía que existían en España. Rodolfo nunca quiso hacer ninguna transición interior dentro del Estado.
Pero los “hombres grises” como Martín Villa también son la derechona, una forma fina de extrema derecha, esa que no se pone la camisa azul, que no saluda con el brazo, ni canta el “cara al sol”, que usa traje gris de Cortefiel y gafas de pasta de profesor de filosofía y letras, que no grita, que siempre habla despacio, con tranquilidad, sopesando las palabras precisas para que todo parezca objetivo, técnico y necesario, para que todos nos creamos que las cosas se hacen por el “bien común”, el progreso o el futuro. Es la extrema derecha técnica, esa que durante el franquismo parecía menos montaraz e histriónica, más moderna y joven. Ahí estaban los ministros tecnócratas (algunos del Opus Dei): López Rodó, Espinosa, Lora Tamayo, Silva Muñoz, López Bravo, Oriol y Urquijo… y una lista larga de apellidos que antes, durante y después de la Transición, y también ahora, siguen copando los consejos de administración de muchas grandes empresas que fueron públicas, las grandes eléctricas, los bancos, las inmobiliarias, el alto funcionariado, los partidos políticos “de derechas”, “transideológicos”, “liberales” y hasta alguno que se dice “de izquierda”.
Para conocer mejor toda esa impunidad, esa “no transición” dentro del aparato del Estado y la banalidad del mal que nos habita aún hoy, conviene ver el documental El silencio de los otros, de Almudena Carracedo y Robert Bahar, ganadora de un Goya en 2018 al mejor documental y Premio del público en el Festival de Berlin. Dicen que el documental va de “la lucha silenciada de las víctimas del largo régimen de Francisco Franco, que continúan buscando justicia hasta nuestros días”, pero no va de eso sino de la impunidad y el buen nombre o la amnesia social de la que disfrutan muchos represores franquistas, de la desolación infinita de un anciana que habla en susurros recordando a su madre enterrada bajo una carretera, de estatuas que homenajean a la gente asesinada y son tiroteadas. De una Transición de verdad extraña y muy mal hecha, o hecha muy bien por los Rodolfos.
Y hoy esa derecha “técnica”, “aséptica”, “moderna”, “necesaria”, esa que salta con naturalidad de la política a los consejos de administración, que de nuevo nos quiere salvar y proteger de nosotros mismos a base de leyes mordaza, privatizaciones "salvesequienpueda", recortes de derechos laborales y bonitas palabras electorales, sigue aquí, son los herederos de los Martín Villa, los impunes “hombres grises” que quieren volver al poder, que quizá nunca se fueron (hoy azulones, naranjas y verdosos) y que nos robarán de nuevo “el tiempo”. Así que mucho ojo, haced caso a la pequeña Momo.
https://www.elsaltodiario.com/f-de-facha/rodolfo-martin-villa-hombre-traje-gris-porra-de-la-transicion-
#8MHuelga : ¿Porqué, por quién, como, para qué.....?
Huelga General 8 de Marzo 2019
¿A quién afecta?
Afectará a todos los trabajadores y trabajadoras, de todos los ámbitos sectoriales, públicos y privados, funcionarios y funcionarias, al igual que a empresas y organismos encargados de servicios públicos, sin distinción alguna de situación laboral, sexo, edad o condición social.
.../...
- Acabar con la desigualdad en el ámbito laboral, económico y social de las mujeres respecto de los hombres
- Poner fin a la desigualdad constatada de la división sexual del trabajo en este sistema capitalista y patriarcal
- La retirada de las políticas, leyes y actuaciones del capital que conllevan la discriminación y desigual oportunidad en el acceso al empleo y promoción profesional de las mujeres y el fomento de medidas efectivas para la disminución de la mayor tasa de paro femenina
- La adopción de medidas concretas e inmediatas que acaben con la brecha salarial y la desigualdad en las pensiones
- Erradicar los estereotipos de género y la persistencia de los valores machistas en las estructuras de las organizaciones
- Control sobre las implantaciones de los Planes de Igualdad en las empresas, sancionando y señalando a las empresas que incumplan la ley 3/2007
- La erradicación de los diferentes acosos en el trabajo, la precariedad laboral, temporalidad, las dificultades en la promoción y la alta tasa de contratos con jornadas parciales que sufren las mujeres
- El establecimiento de políticas laborales sociales y económicas que hagan efectivas la conciliación real de la vida familiar laboral y personal, así como la corresponsabilidad en los cuidados.
- Consideración de las tareas de cuidados como trabajo con derecho a remuneración y derecho a sus prestaciones contributivas independientes.
- 10. La equiparación efectiva y real de las Empleadas del Hogar al régimen general con todos sus derechos.
11. La exigencia al gobierno de dotación presupuestaria suficiente para desarrollar medidas concretas y efectivas contra las violencias machistas
12. La igualdad material efectiva de las mujeres migrantes y refugiadas, así como el cierre de los CIE.
13. Por una educación no sexista. Desarrollo de la coeducación en valores no violentos ni competitivos. Sacar a las Iglesias, religiones, concretamente la católica del ámbito público, en particular de la educación.
14. Acabar con la violencia sexual, queremos espacios y relaciones seguras en las que se respete la voluntad y la libertad de cada persona.
15. El machismo debe salir de los juzgados, estamos contra la justicia patriarcal que protege a los agresores y cuestiona a las víctimas.
LEER ARTÍCULO COMPLETO -->> http://rojoynegro.info/articulo/eje-violeta/argumentario-huelga-general-8-marzo-2019
20 feb 2019
GALERIA DE BUITRES CDCXVI
Nuevas multas a Endesa por irregularidades en contratos de luz y gas
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha multado a Endesa Energía con 260.000 euros por irregularidades en la formalización de contratos de luz y gas natural, según ha informado este miércoles el organismo que preside José María Marín Quemada.
En concreto, Competencia ha sancionado a la compañía con 170.000 euros por 17 infracciones leves (14 de ellas contrarias a la Ley del Sector Eléctrico y tres a la Ley del Sector de Hidrocarburos), a los que se suma otra multa de 90.000 euros por haber cambiado de compañía a un particular sin su consentimiento.
Durante la investigación llevada a cabo por la CNMC, el organismo ha detectado que Endesa Energía incumplió su obligación de contar en todo momento con la documentación que acredita la voluntad del cliente de cambiarse de suministrador para 14 contratos de suministro eléctrico. Igualmente, detectó esta práctica en otros tres contratos de suministro de gas natural, de los que tampoco disponía de la documentación exigida legalmente.
En consecuencia, la CNMC considera que la compañía cometió un total de 17 infracciones leves por incumplir sus obligaciones en relación con la formalización de los contratos de suministro de energía eléctrica y de gas natural.
Por otra parte, la CNMC recibió la denuncia de un consumidor, a través de la Consejería de Economía, Industria, Comercio del Gobierno de Canarias, que reclamaba que Endesa Energía le había cambiado de comercializador de electricidad sin su consentimiento en tres propiedades que previamente fueron de un familiar fallecido meses antes.
En consecuencia, la compañía ha sido multada con 90.000 euros por haber cometido tres infracciones leves, según Ley del Sector Eléctrico.
Competencia recuerda que recientemente también ha sancionado a Endesa Energía con 30.000 euros por incumplir los requisitos de contratación con los clientes, y anteriormente, con otros 120.000 euros por dar de alta a clientes sin contar con su consentimiento. Meses antes, esta compañía también fue sancionada con 30.000 euros por una práctica similar.
La CNMC insiste en que las comercializadoras de electricidad y gas natural deben cumplir los requisitos fijados por la Ley cuando formalizan sus contratos y muy especialmente cuando se trata de consumidores vulnerables.
Asimismo, recuerda que están prohibidas las ventas en el domicilio, salvo que exista petición expresa por parte de los consumidores y sea por iniciativa suya.
La CNMC obligó el pasado mes de septiembre a los principales grupos energéticos a cambiar su imagen de marca para que los clientes puedan distinguir entre la empresa comercializadora que ofrece la tarifa regulada en electricidad (PVPC) y gas (TUR) y la que actúa en el mercado libre.
https://www.publico.es/economia/comision-nacional-mercados-competencia-nuevas-multas-endesa-irregularidades-contratos-luz-gas.html
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