20 sept 2019

GALERIA DE BUITRES DXXIX

Las plataformas digitales de reparto escatiman 74,6 millones de euros al año a las arcas públicas
Su modelo de negocio se centra en las tres “P”: penosas, precarias y peligrosas
El abuso de la figura del falso autónomo que hacen las plataformas digitales escatima al menos 74,6 millones de euros a las arcas de la Seguridad Social cada año, según los cálculos realizados por ugt.
El Secretario de Política Sindical de ugt, Gonzalo Pino, y el Coordinador de Turespuestasindical.es, Rubén Ranz, han presentado en el día de hoy el informe “El trabajo en las plataformas digitales de reparto”, un análisis la realidad del trabajo, su regulación o el impacto económico de plataformas como Glovo, Deliveroo, Ubereats y Stuart.
Según el estudio, un repartidor cobra al mes entre 750 y 1.000 euros brutos, a los que deben descontar 450 euros de cuota a la Seguridad Social y el seguro. Para comparar las cotizaciones sociales, el sindicato utiliza las que deberían pagar estas empresas si el 20%, el 50% y el 80% de sus repartidores estuvieran sujetos a la tarifa plana de autónomos, De forma que éstos pueden estar ingresando actualmente a la Seguridad Social una cantidad anual que va de los 18 millones a los 41 millones de euros.
Si tuvieran contratos laborales con las plataformas y cobraran los salarios del convenio de hostelería, la Seguridad Social ingresaría 92,6 millones de euros, de los que 76,8 millones corresponderían a las empresas y 15,8 millones a los repartidores. En caso de que cobraran lo mismo que los trabajadores no cualificados del INE, la Seguridad Social debería ingresar 69,6 millones de euros.

Las tres “P”: penosas, precarias y peligrosas.

Para Gonzalo Pino, Secretario de Política Sindical de ugt , en base a los datos obtenidos de las encuestas realizadas a los trabajadores, estas plataformas “establecen unas relaciones laborales atípicas que redundan en unos menores salarios y unas peores condiciones para los trabajadores y trabajadoras. Su modelo de negocio se centra en las tres “P”: penosas, precarias y peligrosas. Trabajadores que tienen una media de ingresos al mes que suponen tan solo el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), una media de gastos de 450 euros y una media de horas semanales que superan las 40”.
En este sentido, ha considerado que “las plataformas digitales de reparto lo único que ofrecen son unas condiciones de trabajo impredecibles, innegociables y que obligan a la adopción de conductas perjudiciales para los trabajadores y trabajadoras. Un modelo que supone un desamparo del trabajador ante la empresa y condena a un segmento importante de la clase trabajadora a la inanidad y a la explotación”.
El secretario de  ugt ha manifestado que “estas plataformas se ahorran 4.200 euros por persona en salarios respecto a si hiciesen un contrato estándar a los trabajadores y trabajadoras. Además, se ahorran 3.400 euros anuales por trabajador en cotizaciones a la Seguridad Social y 4.500 euros al año por trabajador en transferencias de las cotizaciones”.

Trabajadores por cuenta ajena

Por su parte, el Coordinador de Turespuestasindical.es, Rubén Ranz, ha especificado que los trabajadores de estas plataformas “no son emprendedores, como se quiere hacer ver. Hay que desmontar esta idea porque la figura del autónomo es el instrumento que utilizan para funcionar bajo un modelo sin derechos laborales y con una serie de prácticas marcadamente abusivas. Unas prácticas que no son éticas, con muchas dudas sobre su soporte legal y que son clara y notablemente peores para el trabajador que las de la relación laboral ordinaria”.
Unas prácticas donde “vacaciones, enfermedad e incapacidad por accidente laboral no son derechos del trabajador, sino costes que acaban expulsándoles de la actividad. Accidentes laborales en estas plataformas hay todos los días, pero los trabajadores se ven obligados a continuar con su actividad, en una evaluación constante por parte de la empresa, para no verse obligados a ir al paro”.
“Lo que hay que hacer”, ha señalado, “es cumplir la ley, porque no existe un vacío normativo en esta materia como nos quieren hacer ver los empresarios. De hecho, en las sentencias que ya hemos ganado tanto a Glovo como a Deliveroo, se constata que los trabajadores de las plataformas digitales tienen una relación laboral clara con la empresa en los términos que marca la ley (ajenidad, subordinación o dependencia, remuneración, voluntariedad)”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario