La historia se repite. La situación que desencadenó el cierre del espacio aéreo español, durante 24 horas, el 3 de diciembre de 2010, vuelve a estar encima de la mesa. Los operadores que dirigen el tráfico aéreo que circula por las calles del aeropuerto de Madrid-Barajas denunciaron a la empresa pública Ineco, dependiente del Ministerio de Fomento y de la que dependen las 47 personas que conforman el Servicio de Dirección de Plataforma (SDP), por "modificación sustancial de condiciones de trabajo". Así consta en el citado documento, que instruye el Juzgado de lo Social número 41 de Madrid y al que tuvo acceso este diario. En él, los trabajadores advierten de que se "están poniendo en serio peligro tanto la salud de los trabajadores, como la propia seguridad del tráfico aéreo", y revelan la creación de "turnos de refuerzo" para paliar la falta de personal, según precisaron. "La modificación somete a los operadores a un estrés gratuito que interfiere en el correcto desarrollo de sus tareas de control del tráfico aéreo".
Este servicio, conocido por las siglas SDP, entró en funcionamiento en Barajas en 2011, después del conflicto entre controladores y Fomento que derivó en un estado de alarma, por primera vez en España, durante 43 días. José Blanco, el ministro de turno en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, zanjó la falta de personal en las torres y en los centros de control sustituyendo a los controladores que trabajaban en el control de plataforma de determinados aeropuertos por técnicos -no considerados personal aeronáutico-. Su función era informar a los pilotos cuáles eran las calles a seguir para ir a la cabecera de la pista de despegue o al párking, en caso de que la aeronave acabara de aterrizar.
A día de hoy, estos técnicos -cuya formación fue un curso que les costó 12.800 euros- realizan funciones de control aéreo similares a las de un controlador. No tienen competencia para usar el sistema de radar, pero se ven obligados a ello en días de baja visibilidad. Y su zona de control debe limitarse al aparcamiento de aviones y plataforma, es decir, a las calles aledañas del aeropuerto, no a las principales. No obstante, controlan también el tráfico que circula por las calles de rodaje, conocidas como Alpha y Mike.
Trabajan con contratos temporales. El salario bruto medio es de 25.500 euros anuales, más un plus de turnicidad de un máximo de 3.000 al año y otro de disponibilidad de hasta 1.000 euros anuales. A finales de 2015, Ineco realizó nuevos contratos, rebajando el salario base a los 21.000 euros.
El servicio SDP de Barajas soporta un tráfico aéreo de más de 250.000 movimientos al año, con un tránsito de pasajeros que supera los 45 millones. Tomando como referencia los datos que maneja la Asociación Internacional de Aeropuertos (ACI), correspondientes a 2015, Barajas ocupa el puesto 24 entre los principales aeródromos del mundo, en términos de tráfico de pasajeros, con 46,8 millones de personas contabilizadas. Esto es, un 12% más que un año antes. Conviene precisar que en 2010 esa cifra era de 49,8 millones de personas, ocupando el puesto número 12.
En 2010, Blanco modificó los tiempos de actividad y descanso de los controladores, cambiando su convenio colectivo. En esta ocasión, la decisión la tomó la empresa Ineco, incluyendo un turno de refuerzo y otro de nueva creación, según consta en la demanda presentada en el juzgado. En ambos casos, el motivo de la modificación fue el mismo: la falta de personal de control y el aumento del tráfico aéreo en España.
Incumplimientos de los turnos de descanso
La diferencia con la planificación de hace seis años es que, en este caso, los mal llamados controladores del SDP notificaron la situación de falta de personal a la empresa antes de que ésta optase por modificar los turnos. Para ello, recurrieron al Sistema de Notificación de Sucesos, creado para informar a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa) de cualquier situación anómala. Desde el pasado mes de septiembre, la agencia tiene constancia de que se está incumpliendo el período de descanso mínimo del 25% del turno. Es más, en esas notificaciones, se alertó también de que "la falta de descanso puede provocar una disminución del nivel de atención necesario para realizar una gestión segura y eficaz del tráfico", según consta en los citados documentos, a los que tuvo acceso este diario.
El colectivo fue a más y el pasado 23 de diciembre registró un escrito en la agencia, dirigido a Isabel Maestre, directora de la Aesa, notificando "una situación sobrevenida" los días 19 y 20 de ese mes, en el turno de noche, en dos de las tres torres de control de Barajas. En lugar de haber dos técnicos por torre, que es la plantilla mínima requerida para prestar el servicio en turno de noche, había tres operadores para todo el aeropuerto. La situación "expone a los operadores programados a sobrepasar el tiempo máximo de actividad de frecuencia, y consecuentemente incumplir de nuevo los descansos mínimos establecidos". "Calificamos este tipo de situación inaceptable e insostenible, ya que vulnera tanto los derechos de los trabajadores como los principios de seguridad aeronáutica", concluyen.
Fuentes de la Aesa reconocieron a este diario la recepción de una carta dirigida a Maestre, pero advirtieron de que no contestaron por no estar firmada y ser considerada "anónima, desde el punto de vista administrativo". El colectivo firmó la citada misiva con un correo electrónico, aunque en el primer párrafo de la misma informaba de que se trataba del "Colectivo de Operadores del Servicio de Dirección de Plataforma del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, trabajadores pertenecientes a la empresa estatal Ingeniería y Economía del Transporte S.A. (Ineco)".
Las mismas fuentes consultadas informaron a este diario de que, el pasado mes de noviembre, auditores de la agencia visitaron las torres en las que trabajan los operadores del SDP de Barajas y que el resultado de la visita fue "favorable". Dicho de otra manera, "todo era correcto y se cumplían las reglas de seguridad", precisaron.
Las 47 personas que conforman el equipo de operadores que dirigen a los aviones por las calles de Barajas soportan el 80% de la circulación que transita por este aeropuerto. En número de movimientos, llegan a controlar una media de 1.000 movimientos diarios, con horas concretas -conocidas en el argot aeronáutico como meneos- en las que tienen bajo su responsabilidad entre 28 y 40 aviones.
La distribución de los tiempos de trabajo se divide en mañana, tarde y noche, con cuatro operadores por turno y por torre, salvo en la franja nocturna, con dos por torre.
1.800 horas anuales
Es la cuarta vez que Ineco modifica la programación de este colectivo, tomando como referencia el convenio de los trabajadores que dependen de esta empresa, dedicada en su mayor parte a la rama de ingeniería. En este sentido, fuentes de Ineco justificaron estas modificaciones alegando que los operadores en cuestión no cubren el número de horas laborales máximas estipuladas en ese convenio.
El artículo 22.1 de este documento recoge que "la jornada ordinaria máxima de trabajo efectivo, en cómputo anual, será de 1.800 horas". Según explicó la empresa a este diario, los trabajadores del SDP de Barajas sólo cubren 1.500 horas al año. Ineco reconoció también que "los nuevos turnos se han estructurado acorde con las necesidades del aeropuerto".
José Blanco modificó el convenio de la actividad de los controladores a través de un real decreto. Ineco lo hizo mediante un correo electrónico remitido al colectivo. "Con la finalidad, por una parte, de que cada operador pueda disponer con una mayor certeza de su tiempo libre y, por otra, de garantizar en todo momento la continuidad del servicio y la seguridad de las operaciones, se ha procedido a revisar y actualizar la programación". Así arrancaba el correo, fechado el 13 de octubre de 2015, para 17 días después volver a modificar estas instrucciones, activando un nuevo turno.
Además del servicio de dirección de plataforma de Barajas, Ineco es la empresa que gestiona los servicios de control de tránsito aéreo que se prestan en las torres de control de La Gomera y El Hierro. El servicio SDP también existe en el aeropuerto de El Prat, en Barcelona, pero en este caso los operadores son controladores.
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