Los chinos de HNA, según ABC, están detrás de Air Europa (se supone que también de Globalia, pues el presidente de vender lo vendería todo y la compañía aérea está especialmente vinculada a las minoristas y Travelplan, sin olvidar el handling). Pero Juan José Hidalgo, de acuerdo con el periódico mallorquín Ultima Hora, su diario más próximo, no está por la labor de vender, aunque tampoco lo niega (su redactor de turismo, Juan Luis Ruiz Collado, quien siente una gran admiración por el empresario salmantino, opina al respecto que “en todo caso Pepe se quedaría con el 51 por ciento”, según publicó en sus sección El Crisol).
El accionista mayoritario de NH podría haberse interesado por el grupo de Hidalgo, como lo han hecho otros grupos inversores. Pero el que mantenga conversaciones -si las ha mantenido- no implica necesariamente que la operación esté próxima a hacerse. Y hay un punto que no cuadra en el marco del supuesto interés de HNA por Air Europa (o Globalia), y es la reciente adquisición de los chinos del handling Swissport. ¿Para qué quieren estos a Swissport si en la operación de Hidalgo entraría Grandfource? ¿Comprar a la vez dos empresas de handling, aunque ésta sea más pequeña que la otra? Raro, muy raro.
Pero en el mundo de las operaciones financieras cualquier cosa es posible, nada descartable. Los chinos de NH parecía en principio que venían a España a marear la perdiz, como otros compatriotas y algunos grupos oscuros. Pero lo cierto es que han llegado para quedarse, al menos en la hotelera urbana. E igual en Swissport. Está por ver si harán lo mismo en Air Europa-Globalia. Lo deseen o no, el problema con el grupo de Hidalgo es que este quiere morir con las botas puestas, al pie del cañon. Es decir, él controlando y, a la vez, pilotando la nave. Y los chinos, con cuentos o no, chinos son: de tontos no tienen un pelo.
L. G.
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